Este es un experimento simple pero sirve para distorsionar de alguna forma la ley de la atracción gravitacional y es que si dejas caer un imán dentro de un tubo de cobre, el campo magnético que se genera dentro se modifica y se crea una corriente dentro del tubo que origina un campo magnético distinto. Precisamente no nos darán el premio nobel de física por nuestros conocimientos en este campo, pero entendemos que con experimentos de este tipo se logran cosas increíbles y sobretodo se empleará para construir naves que viajen a velocidades hasta ahora desconocidas para nosotros.