Fundado por Fray Pedro de Alcántara en el año 1557 y situado en la pequeña población cacereña de Pedroso de Acim, el Convento de Nuestra Señora de la Concepción del Palancar es conocido por ser el monasterio más pequeño del mundo. Cuenta apenas con capilla, cocina, comedor y diez celdas en sus apenas 75 metros cuadrados construidos. En la actualidad está habitado por cuatro hermanos, frailes de la Orden de los Franciscanos que son los encargados de realizar las visitas guiadas al Monasterio.